La alemana cumple este miércoles 73 años.
se dieron puerta en 1989 para hacer caja con la venta de la exclusiva. Hoy siguen funcionando como un matrimonio. Uno que se quiere y hace vida en común bajo el mismo techo. En algún momento antes de esa separación de mentirijilla que duró un año, losen el que él se vistió de esmoquin y ella con un vestido de escote corazón ajustado hasta el muslo.
ha huido de la elegancia aristocrático-burguesa, apostando por un estilo propio que combina lo hippy con lo principesco sin despeinarse. Esta falta de prejuicios le ha permitido hacerse con una de las colecciones más amplias de prendas concebidas comoConexión real. Algunos saraos estivales de la Costa del Sol durante los años 90 no estuvieron exentos de cierto protocolo palaciego y Gunilla se adaptó a ellos con soltura. Pocos pueden presumir de haber asistido al colegio con ely la von Bismark es una de ellos. En esas citas nuestra protagonista solía apostar por la misma fórmula de vestido compuesto por un cuerpo ajustado con escote y falda levantada por un cancán.